Se acerca fin de año, y como todo
el mundo en estas fechas, tras hacer un
breve balance de el año anterior, ya estas planeando como vas a empezar el año
nuevo: de que modo puedes mejorar tus hábitos, que vas a hacer en el 2013,
que nuevos propósitos son deseables para el año entrante, etc. Entre los objetivos o logros encontramos
los que son más típicos como: dejar de fumar, perder peso, ir al gimnasio, etc.,
y algunos no tan típicos, acordes con la individualidad de cada uno de
nosotros, pero propósitos al fin y al cabo.
Empezamos bien!!!, llenos de
entusiasmo y ganas de iniciar esta nueva etapa con buen pie, pasa fin de año,
tenemos nuestros propósitos y el día dos
como mucho nos ponemos a ello, pero…., pronto se tuerce, y los dejamos, perdemos el entusiasmo que tanto nos cautivó
días atrás y los olvidamos. De modo que
pasan a ser objetivos acumulados para años próximos....
¿Por qué no podemos cumplirlo?
No es que sea imposible conseguir
un cambio en nuestra rutina, quizá sea el planteamiento que hacemos para
conseguirlo.
Desde nuestro punto de vista
existe una simple razón, no es el momento, simplemente por ser fin de año no es
suficiente para poder realizar tareas tan importante como las indicadas. Dejar
de fumar, por ejemplo, implica tener una buena forma alternativa de controlar
la ansiedad, que hasta ahora controlábamos fumando, como por ejemplo ir al
gimnasio. Hacer dieta, si es solo para perder unos kilos, seguro que no hay
problema, pero realizar una dieta para perder bastante peso implica tener
control medico y soporte emocional, es una tarea muy dura. O ir al gimnasio,
sin una buena motivación es difícil mantener una rutina de este estilo.
¿Entonces, cual es un buen propósito para fin de año?
Simplemente es todo aquel para el
que realmente estemos preparados. Por desgracia que se acabe el año no implica
nada mágico que nos vaya a ayudar a superar nuestro día a día, así que si
realmente quieres hacer algo importante, no es suficiente con desearlo, has de
hacerlo, y para ello requiere de esfuerzo, preparación, confianza, motivación,
y sobre todo, constancia.
Los cambios requieren tiempo, no
podemos pretender cambiar varios años comportándonos de una determinada forma,
en dos meses.
No te rindas!!!!
Y si necesitas ayuda, pídela.
“Los
obstáculos son esas cosas espantosas que ves cuando apartas los ojos de tu
meta”
PsicoEspai, Centre d'Atenció Psicològica